En medio de una serie de obstáculos en las clasificatorias para la Copa del Mundo, la selección brasileña de fútbol se encuentra en una encrucijada histórica. Después de sufrir tres derrotas consecutivas, la gota que colmó el vaso fue la impactante pérdida en casa ante Argentina por 1-0, marcando un hito doloroso en la historia de las eliminatorias mundialistas.
El panorama se torna aún más sombrío con la noticia de la lesión de Neymar durante el enfrentamiento contra Uruguay el 17 de octubre. Los informes médicos confirman un desgarro en el ligamento cruzado anterior y el menisco, generando preocupaciones sobre la participación del astro en la próxima Copa América.
Lamentablemente, los peores temores se han confirmado: Neymar no estará presente en el torneo que arranca el 20 de junio de 2024. El médico del equipo nacional, Rodrigo Lasmar, ha declarado a ESPN que acelerar la recuperación del jugador sería un “riesgo innecesario”, apuntando a un regreso para el inicio de la temporada 2024-25 para garantizar una recuperación completa.
Este revés es significativo, ya que Neymar, exjugador del Barcelona, se ha convertido en el máximo goleador histórico de la selección brasileña con 79 anotaciones. Su ausencia deja un vacío en el equipo justo cuando más se necesita su talento y experiencia.
En el Grupo D de la Copa América, Brasil enfrentará a equipos como Colombia, Paraguay y el ganador del playoff de Concacaf (Costa Rica o Honduras). La incertidumbre sobre el rendimiento del equipo sin Neymar añade un elemento de intriga al torneo, y los fanáticos del fútbol estarán atentos para ver cómo se desenvuelven los pentacampeones sin su estrella en esta competencia continental.
